Aquí están links de Música relacionada con la historia de México
http://www.youtube.com/watch?v=1gtceHSmU_0
http://www.youtube.com/watch?v=wpUd6U2pgWs
http://www.youtube.com/watch?v=A_-0dDR4G_o
http://www.youtube.com/watch?v=V8e_yrVJGpg
http://www.youtube.com/watch?v=D8UDNIyg3sw&feature=fvst
http://www.youtube.com/watch?v=RRDE3ohylSU
http://www.youtube.com/watch?v=RlbYf7_fX68
Programa del curso de Historia de México II impartido por el Lic. Aurelio Mendoza Garduño
viernes, 13 de abril de 2012
viernes, 30 de marzo de 2012
UNIDAD 1 LA
NUEVA ESPAÑA DEL SIGLO XVI AL XVIII
1.1-. Antecedentes : El México
prehispánico y la conquista
Conquista del México prehispánico:
A principios del siglo XVI, la civilización occidental se
hallaba en el umbral de una nueva era, sin paralelo hasta nuestros días, de
descubrimientos e incentivos, de fronteras que saltaban en pedazos y de
horizontes lejanos y no soñados. América había sido descubierta, pero el
continente estaba prácticamente inexplorado.
En 1519 iban a cambiar las cosas, con la aparición en
aquellas costas de un hombre de carácter muy distinto al de cuantos lo habrían
precedido. Su nombre era Hernán Cortés, y en menos de tres años, con sus
brillantes dotes de mando, su valor y su suerte casi increíble, iba a conseguir
el hundimiento del imperio mexicano, y del emperador Moctezuma, como ya dijo
nuestro profesor. Su historia tiene significación especial, por que señala el
primer enfrentamiento directo, con toda su fuerza y poder del Viejo Mundo con
el Nuevo.
Los recursos del jefe español eran pocos: once naves que
transportaban menos de setecientos hombres. Pero poseía dos armas secretas,
desconocidas para los nativos americanos: armas de fuego, entre ellas varios cañones
pequeños, y 16 caballos. Cortés utilizó los dos en su primer encuentro con los
habitantes de tierra firme. En una batalla librada cerca de Tabasco, al sudeste
de México, los aterrorizados indios Mayas se mantuvieron valerosamente firmes
contra los cañones, pero los caballos fueron demasiado para ellos.
Al principio imaginaron que hombre y caballo eran
verdaderamente un solo animal, algún monstruoso centauro que cargaba contra
ellos, y huyeron. Cortés, avanzó a grandes pasos hacia un árbol cercano, dio
sobre el un gran golpe con su espada y declaró español el territorio. La
conquista de México había comenzado.
Al día siguiente, los tabasqueños enviaron emisarios de
paz al campamento español, con ricos presentes para sus conquistadores. Entre
los regalos iba una joven india llamada Malitzín. Esta muchacha a quien Bernal
Díaz describe como " de buen parecer y desenvuelta", fue sin duda el
mayor don divino que jamás recibiera Cortés; no por que finalmente llegara a
ser su amante y la madre de sus dos hijos, sino porque hablaba náhuatl y maya.
Cortés ya tenía un interprete español maya, de modo que desde el momento que se
le unió Malitzín terminaron los problemas de lenguaje.
El siguiente desembarco tuvo lugar a unas 200 millas al
norte de Tabasco, dentro de las fronteras del belicoso imperio Azteca de
Moctezuma.
Uno de los primeros golpes de suerte de Cortés,
Quetzalcoatl (la serpiente emplumada), su leyenda revela una fantástica serie
de coincidencias que da a la historia de la conquista el carácter de un cuento
maravilloso: Hace mucho tiempo, dice la leyenda, Quetzalcoatl había bajado a la
tierra en forma de hombre de piel blanca y barba negra; al cabo de veinte años
había embarcado hacia el este. Se decía que algún día volvería para restablecer
su dominio. Su regreso tendría ligar en un "Año Uno Caña", y traería
consigo muchas tribulaciones y sufrimientos. Según el calendario Azteca 1519
era un Año Uno Caña.
Moctezuma tenía razones para inquietarse, incluso antes
de conocer la llegada de Cortés, varios "malos presagios" se habían
sucedido, y cuando sus espías dijeron haber visto una banda de misteriosos
extranjeros mandados por un hombre de faz inusitadamente pálida y barba negra,
las mas horrendas sospechas del emperador parecieron confirmarse.
Mientras Cortés hacía los preparativos para la marcha
llegó otro grupo de emisarios indios a Veracruz. Estos afables miembros de la
tribu Totonaca explicaron que habían sido conquistados por los Aztecas y de los
tributos que les habían impuesto sus odiados señores, por lo que querían unirse
a los españoles en su campaña. El conquistador accedió a llevarlos consigo.
Antes de emprender la marcha, Cortés tomó una decisión
que por su valor y sangre fría debe ser considerada como la mas notable de su
vida: ordeno a algunos de sus marineros perforar los cascos de sus naves y, con
el pretexto de que estaban carcomidas y eran inútiles para la navegación las
llevasen a tierra. De allí en adelante ocurriese lo que ocurriese, no había
retirada posible.
El 8 de noviembre de 1519 conducía Hernán Cortés 400
hombres cansados y sucios por la calzada sur, hacia el interior de la capital
azteca, una procesión distinta avanzaba en dirección contraria, el mismo
emperador, en su palanquín de oro, salía para encontrarse con su dios.
Desmontando de su caballo, Cortés avanzó a grandes pasos
hacia el emperador, y entonces, por primera vez, el Viejo y el Nuevo Mundo se
vieron a la cara.
Para comienzos de 1520 podía decirse que la conquista de
México estaba terminada. Pero la suerte de Cortés cambió súbitamente: las
autoridades españolas en Cuba, enfurecidas por su insubordinación enviaron una
expedición de castigo, que Cortés destruyó.
Entre tanto en la capital se producía un desastre. En
mayo durante un festival religioso, Alvarado decidió saquear a los indios
nobles ataviados con sus mejores joyas y ordenó a sus soldados una matanza para
apoderarse de ellas.
Más de 1000 nativos fueron muertos, y antes de que
transcurriera una hora toda la ciudad estaba levantada en armas, desde entonces
los españoles fueron rodeados en su palacio y cuando pidieron a Moctezuma su
ayuda, este fue muerto a pedradas por su propia gente. El nuevo emperador fue
Cuitlahuac, pero este murió al muy poco tiempo victima de la viruela para ser
sucedido por Cuauhtémoc.
Moctezuma II Emperador que recibió a Cortés
Las últimas esperanzas de Cortés de permanecer en la
ciudad, murieron con Moctezuma. Se dio cuenta de que había de retirarse y ese
misma noche cuando la multitud pareció calmarse emprendió la marcha.
Súbitamente, las aguas a ambos lados de la pasarela se
llenaron de canoas que lanzaron una lluvia de flechas contra los españoles, los
que no murieron por las flechas murieron ahogados por el peso del oro que
llevaban consigo. Cortés perdió más de la mitad de su ejército. Aquella
terrible noche del 30 de junio de 1520 se recuerda como "La Noche
Triste".
Tras tal hecatombe, pocos jefes hubieran querido
continuar la batalla. Pero Cortés estaba decidido a tomar México y el 28 de
diciembre condujo hacia el Valle de México un nuevo ejército de 550 españoles
pero esta vez reforzados por cerca de 10,000 indios aliados además de 13
bergantines para poder atacar por agua.
El asalto final se inició en abril de 1521 pero la
victoria resultó más difícil de lo que había creído. Cortés supo que solo había
una solución, aniquilar lenta y sistemáticamente la ciudad. Y dio la orden a
sus hombres de que destruyesen casa por casa y calle por calle y usaran los
escombros para rellenar el lago. Y así el 13 de agosto de 1521, cayó finalmente
la ciudad de Tenochtitlan.
No hay estatua del conquistador en la moderna ciudad de
México, pero la plaza de las tres culturas, en el lugar donde Cuauhtémoc
reconoció el fin de su imperio, una lápida de mármol pone el mas sabio quizá de
os epílogos.
"No fue triunfo ni derrota. Fue el doloroso
nacimiento del pueblo mestizo que es el México de hoy".
Ciudad de Tenochtitlán
La Batalla de Otumba
Luego de su huida de la ciudad de Tenochtitlan, Hernán
Cortés y sus huestes llegaron a Popotla, donde el capitán veía pasar su cansado
y abatido ejército con lágrimas en los ojos, ante el conocido Árbol de la Noche
Triste. Así llegaron a Cuajimalpa, donde pudieron dormir y curar sus heridas,
para regresar a la media noche y reanudar el camino, aunque fueron descubiertos
y nuevamente perseguidos.
El 2 de julio de 1520, las hostilidades se reanudaron,
pero los españoles tomaron el cerro donde se encontraba un templo llamado
Teocalhueyacan, desde donde resistieron eficazmente; la intención de los invasores
era seguir los lomeríos del poniente del valle en dirección norte para alejarse
lo más posible de México y alcanzar el camino de Tlaxcala, donde tenían aliados
indígenas.
Del 3 al 6 de julio del mismo año, los españoles pasaron
por Tepotzotlán, Aychcualco, Aztaquemécan y Tonaníxpan, donde libraron diversas
batallas. Al día siguiente, al pasar por Otumba para llegar a Tlaxcala,
enfrentaron a un numeroso ejército formado por mexicas, tepanecas, chalcas,
xochimilcas y acolhuas, que venían persiguiéndolos con aliados de Tollan,
Tenayuca y Otumba, todos dispuestos a aniquilar a los invasores.
La batalla duró cuatro horas en el lugar conocido como
Otompan, en el actual territorio de Otumba. Se dice que en cierto momento los
españoles quedaron rodeados por los indígenas, ante lo cual Cortés ordenó
acometer al jefe guerrero Cihuacóatl Matlatzincátzin; este último fue abatido a
manos de Juan de Salamanca.
Muerto su jefe, los indígenas, atónitos, emprendieron la
huida, hecho que alzó con la victoria a las huestes españolas.
Hernan Cortés Conquistador de México
La época
prehispánica de la historia de México comprende los sucesos ocurridos en su
territorio antes de la conquista y colonización española a partir de 1519. Es
necesario aclarar que México es un Estado moderno cuyas fronteras fueron
fijadas a medidados del siglo XIX. Por lo tanto, la historia mexicana de la
época prehispánica es la historia de los pueblos que vivieron en ese
territorio, no la historia del estado mexicano en la época precolombina.
Periodo
preclásico (2500 a.C.-200 d.C.):
Durante este
periodo tiene lugar el desarrollo de la cultura olmeca, que resume todos los
desarrollos culturales de los mesoamericanos de aquel tiempo. De esta cultura
son los primeros indicios de escritura y del uso de calendario. Debieron tener
una estructura social muy compleja que les permitió desarrollar su escultura y
arquitectura monumentales. Los principales sitios de esta cultura son La Venta,
Tres Zapotes y San Lorenzo, ubicados en la llanura costera del Golfo de México.
También se ha encontrado evidencia de ellos en Teopantecuanitlán (Guerrero), y
en Chalcatzingo (Morelos), y se presume que sus relaciones con las áreas
oaxaqueña y Maya contribuyó con el desarrollo cultural de esas regiones.
La declinación
de la cultura olmeca dio origen al periodo Preclásico Tardío (400 a. C.-150 d.
C.). Se trata de una época de diversificación cultural y asimilación de los
elementos olmecas en los sistemas culturales de cada pueblo. Con esa base
dieron comienzo varias de las tradiciones más importantes de Mesoamérica. Sin
embargo, Cuicuilco, en el sur del valle de México, y la Chupícuaro, en
Michoacán, serían las más importantes. La primera llegó a convertirse en la
mayor ciudad de Mesoamérica y principal centro ceremonial del Valle de México;
y mantenía relaciones con Chupícuaro. La declinación de Cuicuilco es paralela a
la emergencia de Teotihuacan, y se consuma con la erupción del Xitle (circa 150
d. C.), que motivó la migración de sus pobladores al norte del valle de México.
La cultura Chupícuaro es conocida sobre todo por su producción alfarera, cuyas
huellas se han detectado por una amplia zona ubicada entre el Bajío y la cuenca
lacustre.
Hacia el
final del Preclásico había comenzado la planificación de las ciudades que
llegarían a ser emblemáticas de Mesoamérica, como Monte Albán y Teotihuacan.
Periodo
clásico (200-900):
Este período está marcado por el
apogeo teotihuacano y concluye con las migraciones nahuas y el establecimiento
de centros regionales en el valle de México. Se divide en dos periodos: el
Clásico Temprano y el Clásico Tardío.
El Clásico
Temprano abarca los primeros 400 años del periodo, y coincide con la época de
mayor apogeo de Teotihuacan. Durante este periodo se consolidó el proceso de
urbanización que se observaba desde el Preclásico Tardío. De esta suerte,
nacieron ciudades como Cholula, en el valle Puebla-Tlaxcala; Monte Albán en los
Valles Centrales de Oaxaca, Tikal y Calakmul en el área Maya (la primera
ciudad, en Guatemala y la segunda en México). Las obras hidráulicas que
permitieron la alta eficiencia de la agricultura mesoamericana también estaban
bien desarrolladas en esta época.
Con la decadencia consumada de Teotihuacan,
en 750, las ciudades mayas también entraron en crisis. Se especula que una
combinación de desórdenes políticos, en el contexto de un desajuste climático,
puso en jaque a los gobernantes de muchas ciudades de la región. De esta
manera, la cultura maya clásica encontró su fin hacia el año 800.
Los
zapotecos fueron otro pueblo que mantuvo relaciones con Teotihuacan. Pero en
este caso, las relaciones iban más allá del intercambio comercial: eran
aliados. Como se dijo más arriba, en Teotihuacan fue encontrado un barrio
completo de zapotecos, que tenía su correspondiente en la metrópoli oaxaqueña.
Cuando se vio interrumpida la relación, por la emergencia de Estados rivales de
Teotihuacan en el Centro de México, los zapotecos continuaron con su desarrollo
cultural autónomo, que vio la época de mayor florecimiento entre los años 750 -
850. Sin embargo, como ocurrió en el caso de Teotihuacan y el área maya, la
capital zapoteca también declinaría y sería finalmente abandonada.
Aprovechando
la debilidad de las metrópolis, varias ciudades cobraron fuerza y tomaron
posiciones centrales en las rutas de intercambio que sostenían la hegemonía de
Teotihuacan. En este panorama, surgieron centros regionales en el Centro de
México: Xochicalco, en Morelos, controlaba el comercio con el Área Maya;
Cholula, en Puebla-Tlaxcala, hacía lo propio con el sureste; Teotenango, con el
Occidente de México. El creciente poder de estas ciudades -y otras como
Cacaxtla y Cantona- terminó por estrangular a Teotihuacan, que colapsó hacia el
año 750.
Periodo
posclásico (800/900- Conquista Española):
El
Posclásico es dividido por los arqueólogos en dos épocas,
el Posclásico Temprano (800/900
- 1100), dominado por Tula
y la cultura tolteca;
y el Posclásico Tardío, tiempo
del imperio mexica (1100 - 1521/1694). Siempre es conveniente aclarar que la
calendarización es variable de acuerdo con la historia regional, dado que
normalmente se toma como referencia lo que ocurría en el centro de México.
Atlantes de Tula. Cultura
tolteca.
Se
suele considerar que el Posclásico fue una época dominada por pueblos guerreros
y sanguinarios que causaron la ruina de las culturas clásicas,
característicamente pacíficas y entregadas a la religión. A la construcción de
este arquetipo contribuyó de manera notable Román Piña Chan. Sin embargo, como señala López Austin en El pasado indígena, el belicismo también estuvo presente en los
periodos anteriores, especialmente entre los mayas. Lo ocurrido durante el
Posclásico sería la exacerbación del carácter guerrero de las sociedades
mesoamericanas, debido en parte a la gran competencia entre Estados muy
poderosos y a las migraciones.
Durante el periodo comprendido entre la caída tolteca
(ca. 1100 d. C.) y la derrota de Azcapotzalco por Tenochtitlan (1430), hubo un
vacío de poder, aprovechado por ciudades de menor envergadura que cobraron un
nuevo y breve florecimiento. Entre ellas se cuenta Cholula, ciudad de añeja
tradición y relacionada con el culto a Quetzalcóatl, y Culhuacán, que fue
ocupada por refugiados toltecas.
A la llegada de los mexicas a la cuenca lacustre, la
escena era dominada por los tepanecas de Azcapotzalco, pues Culhuacán había
entrado en decadencia. Tras un periodo de constante cambios de residencia, se
establecen en el islote de México, en territorio de Azcapotzalco. Sin embargo,
establecieron una alianza con los culhuas, rivales de los tepanecas, a los que
finalmente derrotaron en compañía de Texcoco y Tlacopan, coaligados en la
Triple Alianza.
De esta manera, comenzó un periodo expansionista militar
y comercial encabezado por los mexicas, que llegó a dominar casi toda
Mesoamérica. El expansionismo estaba basado en la ideología religiosa de los
mexicas, quienes se consideraban a sí mismos como hijos del Sol. En tanto que
sus hijos, los mexicas tenían la obligación de proporcionar alimento a los
dioses (sangre y corazones, que en la religión mesoamericana eran símbolos del
tonalli o fuerza cósmica), por lo que emprendían guerras con la misión de
capturar presos. Es por ello que permitieron la relativa independencia de
Tlaxcala, de la que obtenían cautivos en las Guerras Floridas (Xochiyáotl)
necesarios para el sacrificio ritual.
Mientras tanto, en Yucatán, los itzáes habían sido
expulsados de Chichén por los cocomes de Mayapán, con lo cual se rompió la
alianza establecida entre estos reinos y Uxmal. Esta confederación es conocida
con el nombre de Liga de Mayapán. Al disolverse, la península se vio envuelta
en una cadena de guerras entre estados vecinos que disputaban el control
político de la región. Ese fue el panorama que encontraron los españoles a su
llegada a Mesoamérica en el año 1517.
1.2-. Estructura política de la colonia
1.2-. Estructura política de la colonia
Las
instituciones y personas que gobernaron a la Nueva España durante la
colonia fueron las siguientes, en orden
de importancia:
El rey. A lo largo de toda la historia
colonial el rey de España fue la autoridad suprema. En la época de la conquista
de México el monarca en quien recayó la responsabilidad efectiva del gobierno
fue el emperador Carlos I de España y V de Alemania. Su política fue
fundamentalmente absolutista, es decir, concentrando en la corona poder
absoluto, de manera que la voluntad real no tenía límites legales y constituía
la ley suprema. Los reyes gobernaron, pues, a México desde España basándose en
los informes que recibían, interviniendo personalmente en raras ocasiones ya
que delegaron la autoridad en instituciones que actuaban en su nombre. Jamás un
rey de España visitó México ni ninguna otra de las colonias españolas en
América
Carlos
I de España y V de Alemania
El Real y Supremo Consejo de las
Indias. Fue la
autoridad subordinada de más alta categoría creada por el rey para gobernar las
colonias en América, con un grupo de ministros nombrados por él. Las funciones
del Consejo de Indias abarcaban toda clase de asuntos, incluso los relativos al
aspecto administrativo y financiero de la Iglesia en las colonias. Las
decisiones, sentencias, leyes y acuerdos del Consejo representaban de la manera
más directa la voluntad real, y como el rey, el Consejo gobernaba desde España,
donde tenía su asiento. La autoridad del Consejo era, pues, enorme y
comprendía, para decir en términos actuales, la correspondiente a los poderes
legislativo, ejecutivo y judicial.
La Audiencia. Durante La Conquista y su
consolidación fue Hernán Cortés quien
gobernó en la Nueva España, sin embargo muy pronto el rey lo privó de su
autoridad al establecer un órgano gubernamental superior que se llamó la
Audiencia de México. Este órgano, como el Consejo de Indias, estaba integrado
por varios magistrados llamados oidores, fungiendo uno de ellos como presidente
de la Audiencia. En términos generales, las funciones de este órgano eran una
mezcla de poderes, porque no sólo gobernaba en lo político y en lo
administrativo, sino que también era un tribunal superior en asuntos civiles y
criminales.
Hernán
Cortés
El virrey y otros funcionarios. La pésima administración y desmanes
de la primera Audiencia, entre otros factores, mostró la necesidad de que
residiera en México un funcionario que representara en la colonia a la persona
del monarca. El título que se le dio a ese funcionario fue el de virrey,
palabra que, precisamente, quiere decir el que está en lugar del rey. Los
poderes y facultades del virrey fueron muy amplios. En él se depositó toda la
acción gubernamental y administrativa de la colonia que se había concedido a la
Audiencia
El
Virreinato de Nueva España fue una entidad territorial integrante del Imperio
español, establecida por la Corona durante la etapa de su dominio en el Nuevo
Mundo, entre los siglos XVI y XIX. Fue creada tras la conquista de los pueblos
indígenas establecidos en la zona meridional de América del Norte.
La
empresa de la conquista inició en 1519 y propiamente no concluyó, pues el
territorio de Nueva España siguió creciendo hacia el norte a costa de los
territorios de los pueblos indígenas del desierto, algunos de los cuales nunca
fueron sometidos por los españoles. La conquista de Nueva España tuvo uno de
sus hitos más importantes con la derrota de México-Tenochtitlan por parte de
las tropas de Hernán Cortés en 1521. El Virreinato de Nueva España fue
establecido oficialmente el 8 de marzo de 1535. Su primer virrey fue Antonio de
Mendoza y Pacheco y la capital del virreinato fue la Ciudad de México
establecida sobre la antigua Tenochtitlan.
Antonio
de Mendoza
Visitadores. Eran enviados del rey, investidos de
gran autoridad y su labor era la de inspeccionar y revisar la conducta de las
autoridades,virrey incluido, y de imponer suspensiones y penas. Generalmente
los visitadores eran enviados cuando ocurrían alborotos graves que alteraban la
tranquilidad y el orden públicos, cuando había sospecha de malos manejos
financieros, o cuando estaba en peligro la fidelidad de la colonia al rey, como
en el sonado caso de la llamada "Conjuración del marqués del Valle"
que fue el intento del hijo de Hernán Cortés y de un grupo de encomenderos
ricos de separar la Nueva España para convertirla en un reino independiente o
cuando José de Gálvez, villano visitador se encargó de la expulsión de los
jesuitas.
Juicio de residencia. Más que una institución era una
instancia y consistía en una investigación pública acerca del modo en que un
empleado o un funcionario había desempeñado su cargo, particularmente acerca
del manejo de la hacienda. En casos importantes, como eran los relativos al
gobierno y honradez de los virreyes, la investigación la llevaba a cabo un juez
especial enviado desde España. El juicio se llamaba de residencia, porque se
llevaba a cabo en el lugar en que había residido el funcionarío enjuiciado y
porque no se podía ausentar de él sin dejar un apoderado que respondiera a los
cargos.
Ayuntamientos. A las ciudades y pueblos se les
reconocía personalidad como entidades independientes en todo lo relativo a sus
intereses particulares. Para la representación legal y administración de esos
intereses las ciudades o pueblos tenían unos funcionarios y empleados que,
reunidos en un cuerpo de gobierno, tomaban el nombre de ayuntamiento, porque
esta palabra significa, precisamente junta o reunión de personas. A los
ayuntamientos, pues correspondía resolver, reglamentar y ejecutar todo lo
concerniente a la vida de la ciudad y a su desarrollo físico. Es imposible
enumerar la multitud y gran variedad de asuntos que caían bajo el gobierno del
ayuntamiento, pero para dar una idea de ello pueden decirse que, en términos
generales, eran los que hoy corresponden a los gobernadores actuales.
Evangelización, Real patronato de la
Iglesia:
La
evangelización fue otro de los grandes acontecimientos del siglo XVI . Se
inició con la llegada del clero regular, de cuyos pasos quedaron huellas en
diversas regiones de nuestro país. Los primeros misioneros fueron los
franciscanos, luego llegaron los dominicos, los agustinos, los jesuitas y más
tarde otras corporaciones llamadas congregaciones menores. La fundación de
pueblos y misiones trajo consigo el surgimiento de escuelas, monasterios,
parroquias, etc.
La capacidad
racional de los indígenas y el derecho para recibir los sacramentos, tener
libertad e instrucción fueron reconocidos por la bula Sublimis Deus, expedida
en 1537 por el papa Paulo III.
En el siglo
XVI se estableció también el clero secular, integrado por obispos, presbíteros
o curas, fiscales o alcaldes de doctrina y doctrineros; el primer arzobispo de
la Nueva España fue fray Juan de Zumárraga ( 1546 ). Su autoridad superó a la
del clero regular.
Entre otras
instancias, su injerencia se observa en los tribunales del Santo Oficio. Los
primeros representantes de la Inquisición llegaron en 1527. Su labor principal
era perseguir y procesar a quienes ponían en peligro a la fe ( judaizantes,
musulmanes, infieles y herejes ) y, de acuerdo con la cédula real de 1569, se
estableció en las Indias a partir de 1571.
Durante la
Colonia y a partir de los reyes católicos, el absolutismo implicó la unidad
territorial, política y religiosa en sus dominios. Esta unión debía manifestar
el predominio monárquico sobre cualquier institución y, en el caso de la
Iglesia, se logró mediante el Real Patronato, es decir, en el reconocimiento o
legitimidad que los Papas ( 1493-1508 ) habían concedido al poder temporal de
los reyes . El Patronato Real hizo de la Iglesia otra rama del gobierno.
1.3-. La colonia Novohispana
La
fundación:
Luego
de las acciones militares y sometida mediante las armas la capital mexica y en
marcha el resto del Altiplano Central, Hernán Cortés ordenó la demolición de
México-Tenochtitlán y la edificación de sus restos en la nueva capital,
disponiendo al alarife Alonso de Estrada el trazado al estilo español. Los
españoles hicieron de la ciudad de México la capital de una construcción que
denominaron Nueva España, comprendiendo dentro de ella a todos los señoríos
aliados o sometidos por las huestes de Cortés. La primera sociedad novohispana
se constituyó en torno al círculo superior de capitanes de la expedición, con
Hernán Cortés como capitán general de los territorios recién conquistados,
quienes organizaron más expediciones para controlar territorios. El sistema
económico occidental fue implantándose gradualmente, incluyendo prácticas
agrícolas, comerciales y financieras, si bien muchas estructuras indígenas
continuaron prácticamente intactas como la movilidad de las mercancías, las
estructuras de tributación y algunos poderes locales.
Los
indígenas, mayoritarios siempre en la sociedad, luego de ser sometidos por la
vía militar o reconocido el vasallaje español eran reunidos en pueblos o
repúblicas de indios, que fueron constituidos ya fuera por hacerlos a la usanza
occidental en poblaciones importantes y dejando a los mismos gobernadores o por
congregaciones, hechas por poblaciones de varios pueblos dispersos en uno solo
o bien, como trabajadores en las primeras encomiendas y obrajes. Un punto
esencial es que a partir de este proceso, se vivió un colapso demográfico de
las sociedades indígenas, muriendo por cientos a causa de la explotación y las
epidemias, alcanzando un punto crítico a la mitad del siglo XVI. Dichas
congregaciones tuvieron entre sus fines la evangelización de los indígenas, un
proceso que fue primordial en la política española del siglo XVI y realizado
por las principales órdenes religiosas
Los
misioneros católicos:
En el
siglo XVI, los españoles al mando de Hernán Cortés conquistaron a los mexicas y
se hicieron de sus propiedades. La labor misional de la Iglesia Católica inició
con el arribo de las órdenes mendicantes: franciscanos, dominicos y agustinos,
quienes evangelizaron partiendo del Altiplano Central hacia fuera las
localidades más pobladas y creando nuevas en donde eran dispersas. En el
transcurso de la segunda década de tal siglo, Cristóbal de Olid, Pedro de
Alvarado y Nuño Beltrán de Guzmán, se apoderaron de gran parte del territorio
mexicano, salvo el norte del país, donde las tribus chichimecas perduraron
hasta principios del siglo XVII, cuando fueron casi exterminadas. En ese mismo
siglo, la labor de los frailes llegados a Nueva España, permitió la extensión
de los núcleos poblacionales a Nuevo León, donde se fundaron Cerralvo,
Cadereyta y Sabinas Hidalgo.
En ese
mismo período, la labor de los franciscanos hizo posible la fundación de Paso
del Norte, en 1682. Carlos de Sigüenza y Góngora, intelectual y geógrafo
mexicano, se dedicó a tareas de cartografía en las Nuevas Filipinas (Tejas) y
en el puerto de Panzacola, donde se edificó el fuerte de San Carlos para
defender la localidad de ataques piratas.
La
Compañía de Jesús sustituyó paulatinamente la labor de los franciscanos, pero
la amplió en el aspecto cultural y educativo. Eusebio Francisco Kino fue un
misionero nacido en Trento, Italia llegado a la Nueva España alrededor de 1680.
Sus misiones se difundieron por Sonora y Arizona, pero su mayor obra fue haber
fundado Magdalena de Kino, en el norte del territorio sonorense. Su trabajo de
fundación y conocimiento geográfico quedó resumido en la obra del también
jesuita Francisco Javier Alegre, Los apostólicos afanes, dedicada al Papa
Benedicto XIV, y que fue publicada en Roma en 1749
Siglo
XVII :
Este
siglo fue el de la mayor expansión novohispana, al contrario de lo sucedido en
la metrópoli, que entró en decadencia. En 1598, Felipe II murió, dejando como
heredero a su hijo Felipe III, quien entregó el gobierno a ministros como el
duque de Lerma y el duque de Uceda, quienes no supieron manejar el gobierno y
metieron a España en guerras por defender la religión católica, o como bajo
Felipe IV durante la Guerra de los Treinta Años, en la que España perdió sus
posesiones en Holanda, mediante la Paz de Westfalia (1648). La política de
Felipe III fue continuada por su hijo Felipe IV, que reinó de 1621 a 1665.
Durante su reinado se dio el llamado Siglo de Oro español, con exponentes como
Luis de Góngora y Lope de Vega en la literatura; y Diego Velázquez y Bartolomé
Esteban Murillo en la pintura. Carlos II sucedió a su padre en 1665 y gobernó
diez años bajo la regencia de su madre, Mariana de Austria, quien se rodeó de
ministros extranjeros y casó a su hijo en dos ocasiones (con María Luisa de
Orleans en 1679 y Mariana de Neoburgo en 1689) pero el monarca no consiguió
descendencia. Al morir en 1700, el rey nombró como su sucesor a Felipe de
Anjou, nieto del rey francés Luis XIV. Sin embargo, el emperador del Sacro
Imperio Romano, Leopoldo I, se negó a aceptar dicho acuerdo y comenzó la Guerra
de Sucesión Española, en la que triunfó el heredero francés, pero el conflicto
mermó seriamente las finanzas novohispanas.
Felipe
IV de España
Suscribirse a:
Entradas (Atom)